Innegablemente todo en esta vida es difícil de conseguir.
Pero hay cosas que resultan casi imposibles de lograr.
Qué puedo decir al respecto: Casi nada. O, muy mucho. No sé.
Sin ambages. Hoy estoy muy mosqueado.
Tanto, que hasta se me han quitado las ganas de escribir.
Ni tan siquiera, esas pocas líneas que últimamente publico.
Lo que un escritor más necesita es silencio.
No gritos, ruido e interrupciones constantes y disonantes.
Me viene a la mente un dicharacho cubano que nos dicta:
– No es lo que jode muchacho, sino lo seguido y disparejo que lo hace!
POSÍ!!! Exactamente lo que a mi me viene sucediendo de hace tiempo.
Tanto, que apenas alcanzo a recordar.
Que sí. Que sí. Que hoy estoy al límite. Y claro, no hago más que rumiar:
– Menuda mierda de publicación la de hoy. Sólo lamentos coño!!!
Es por eso que he decidido colgar la estupenda balada, interpretada por el genial Miguel Ríos, titulada: Y todo a pulmón…
Aunque hoy y en mi caso, sería mucho mejor anotar:
– Y todo a KOJÓN. Puro KOJÓN, ÓN, ÓN…
¿Estaré deprimido? Para nada. Simplemente estoy distraído.
Saludos a todos y gracias por vuestro soporte.
Mediterraneo 